La alfombra roja de la entrega de premios del Festival de Cine de Palm Springs

Después de unos días de descanso, comenzamos el año y la temporada de premios con la primera cita que teníamos marcada en nuestra agenda: la ceremonia de clausura del Festival de Cine de Palm Springs, en cuya entrega de premios vimos a varios de los actores y actrices que suenan con más fuerza de cara a los Oscars.

Si bien es cierto que estoy contento por las victorias de Julianne Moore y Eddie Redmayne en sus respectivas categorías, creo que la alfombra roja de anoche dejó bastante que desear. Eso sí, hay un estilismo que destacó por méritos propios:

A Julianne Moore le quedaban pocas cosas por hacer para que la adoráramos todavía más (es una de las pocas que se atreve con la Alta Costura de Chanel y que siempre nos gusta lleve lo que lleve), pero probablemente llevar un diseño de Delpozo era una de esas cosas. Porque resulta muy refrescante que la actriz rompiera anoche (suponemos que de modo aislado) su idilio con el clásico bicolor blanco y negro, y que lo hiciera de la mano de una firma española nos deja todavía mejor sabor de boca. Como es habitual en los diseños de Josep Font, el vestido se caracteriza por la simplicidad de su silueta y el juego con los tejidos y los volúmenes, gustándonos especialmente el corte del escote palabra de honor y las mangas caídas. Magníficas también sus sandalias de Stuart Weitzman, a juego con el bajo en rosa empolvado del vestido, y matrícula de honor para su maquillaje lleno de luz. ¡Así se empieza una Awards Season!

A los demás famosos de la noche, nos los llevamos al rincón de castigo...:

Nunca se me pasó por la cabeza que los dos intérpretes protagonistas de La teoría del todo me fallarían alguna vez sobre la alfombra roja, y mucho menos que ambos escogerían el mismo día para hacerlo (supongo que todos tenemos días malos...).

Felicity Jones no tuvo su mejor noche, en gran parte por culpa de un vestido nada favorecedor perteneciente a la diseñadora filipina Monique Lhuillier. Toda la frescura que suele desprender la británica desapareció entre una indescriptible amalgama de encajes, cortes cruzados poco favorecedores y una falda columna en satén con unas poco deseables arrugas en las zonas laterales. Sinceramente, creo que le ponía muchos años encima, ayudado en gran parte por un maquillaje que endurecía demasiado las facciones de la actriz y por un recogido que me horroriza especialmente por su nuevo color de tinte (esperemos que sea temporal).

Y todavía más extraño es que Eddie Redmayne no nos gustara (no recuerdo la última vez en que esto sucedió, si es que había pasado antes), pero lo cierto es que pasó sin pena ni gloria sobre la alfombra roja. Puestos a apostar por el esmoquin, se agradece el toque de la chaqueta de terciopelo en azul tinta, pero no me gusta nada que haya combinado esta prenda con unos pantalones en negro. Pocas tendencias masculinas hay que no me gusten, pero una de ellas es la combinación de colores distintos en un traje para acudir a un evento formal. De su mujer no digo nada, porque ni sé qué lleva puesto ni tampoco es que me importe.

El estilismo de Rosamund Pike probablemente no sea merecedor de entrar en la zona de castigo, pero me gustaría saber quién le ha dicho a la actriz de Perdida que solamente existen vestidos negros en línea A para las (post)embarazadas sobre la alfombra roja. Por lo menos, es de agradecer que el Alexander McQueen de esta ocasión juegue con la inspiración oriental, bien incluida también en el maquillaje... pero es que esta chica lleva a lo tonto más de medio año ofreciéndonos lo mismo sobre la red carpet. Ahora que ya hace un mes que dio a luz, es hora de volver a arriesgar (si es que alguna vez lo hizo) sobre la alfombra roja.

Por su parte, las dos actrices de Wild tampoco fallaron estrepitosamente, pero creo que pueden dar mucho más de sí. Por ello, no me creo que Reese Witherspoon no tenga nada mejor que ponerse que este vestido negro con aplicaciones en relieve en forma de perlas que crean un estampado a topos de Michael Kors. Es cierto que ella siempre va ideal, como cabe esperar en la Barbie de Hollywood, pero esperamos que para esta temporada de premios deje atrás esa serie de repetitivos minivestidos que no aportan nada y que nos hemos cansado de ver a lo largo de los últimos meses. De todos modos, como en cualquier estilismo de Leslie Fremar, todo encaja a la perfección y está aburridamente impecablemente estudiado de pies a cabeza.

Su compañera de reparto Laura Dern sí que nos ha sorprendido, al menos teniendo en cuenta su (inexistente) trayectoria sobre la alfombra roja. Creo que no habíamos hablado de ella durante la promoción de Wild, básicamente porque se presentaba en cada estreno siempre con vestidos negros de corte poco favorecedor. Pues bien, anoche sorprendió con una creación de Matthew Williamson en un potente color naranja y con bonitas aplicaciones florales en violeta. El único problema que veo es que sigue apostando por el mismo corte recto de siempre, y creo que la actriz podría sacarse mucho más partido si añadiera algo de volumen y mejorara sus poses. Esperemos que este look sea un propósito de cambio de cara a este 2015.


No sé si será porque empiezo el 2015 con unas expectativas demasiado elevadas o porque sé que estos famosos lo pueden hacer mucho mejor sobre la alfombra roja, pero creo que solamente se salva el magnífico estilismo que han protagonizado Julianne Moore y Delpozo. ¿Estás de acuerdo conmigo? ¿Qué te ha parecido esta primera red carpet del año?

O.