La colección Resort 2015 de Louis Vuitton (y los looks de las invitadas)

Pocas cosas hay que puedan distraer nuestra atención del Festival de Cannes 2014, pero sin duda la presentación de la nueva colección Resort 2015 de Louis Vuitton en Mónaco es una de ellas. Y recordad antes que nada que a mí no me gustó especialmente la colección Fall 2014, la primera que presentó el diseñador Nicolas Ghequière al frente de la firma.

Pero antes, veamos los estilismos que llevaron las invitadas al desfile:

Si hay alguien que no se pierde ninguno de los desfiles de Louis Vuitton, esa es la socialité y editora de moda Miroslava Duma. En esta ocasión la it-girl rusa apostó por un conjunto de la colección Fall 2014 (lo lógico, teniendo en cuenta que las anteriores de Louis Vuitton fueron diseñadas por Marc Jacobs y no me parece de muy buen gusto recordar que algunos tiempos pasados de la firma fueron mejores...). Eso sí, este es un look sorprendente porque, como ya han hecho otras famosas, demuestra que la colección Fall 2014 es bastante más ponible de lo que yo pensé en un primer momento. Yo no sé qué os parecerá, pero a mí me encanta el estampado de la parte superior del diseño y el aire vanguardista que desprende en su conjunto.

Tampoco faltaron al evento otras tres incondicionales de la firma, llevando todas ellas diseños de la colección Fall 2014. En primer lugar, vemos a la actriz francesa Adèle Exarchopoulos, enfundada en unos pantalones de cuero y con una bonita blusa sin mangas que destaca por sus minimalistas detalles. Más colorido es el estilismo de la asiática Zhang Ziyi que ha hecho suyo ese toque del cinturón doblado que desde un primer momento se convirtió en emblema de la colección. Genial también el modo en que utiliza en su look la tendencia del color blocking, con una clara inspiración retro. Finalmente, una de las invitadas que menos me ha gustado ha sido la actriz Jennifer Connelly, pues sigue en su empeño por copiar los estilismos tal cual los vimos en pasarela. No tengo nada en contra del vestido con silueta estructurada, pero el intento de ir con botas acorta visualmente la figura y resulta muy poco favorecedor.


Ahora toca ver la colección, aunque de nuevo nos enfrentamos a la misma sensación que tuve cuando se presentó la colección Fall 2014. En principio, la verdad es que no me gusta, pero espero que las famosas devotas de Louis Vuitton tengan la oportunidad de demostrarme que es más ponible en el "mundo real" de lo que parece a simple vista:

De nuevo, lo que más sorprende en la colección de Ghesquière para la firma es el eclecticismo, pues lo mismo sale a la pasarela un conjunto muy cerrado en tonos lisos que un vestido con aberturas laterales y mezcla de estampados. Y eso a mí no me da buena impresión, porque tengo la sensación de que el diseñador todavía no ha logrado encontrar un estilo definido dentro de las exigencias de la firma (eso sí, es normal que se tarde a encontrarlo dos o tres colecciones, pues no es el primer caso que vemos). No obstante, en líneas generales las prendas me parecen poco favorecedoras... si a las modelos ya les quedan regular, no quiero imaginar a las actrices, cantantes, etc. Lo único que salvo de estos tres conjuntos son los zapatos, la verdad.

No han faltado en la colección los motivos acuáticos ni las chaquetas de silueta estructurada, elementos que según Ghesquière justifican la inspiración monegasca de la colección. La verdad es que los pantalones que se han visto sobre la pasarela son en conjunto las prendas más salvables de la colección, pues presentan un corte sofisticado y unos colores llenos de luz. Pero si os fijais en las prendas superiores de las dos primeras fotografías, la verdad es que me parecen, como poco, feas. Más me gusta el abrigo en pata de gallo con efecto jaspeado que vemos en el tercer estilismo. En este caso, los complementos vuelven a ser uno de los mejores elementos del look, pues los bolsos me encantaría verlos en el street style de socialités como Miroslava Duma u Olivia Palermo.

Entramos en terreno pantanoso con los diseños de corte más vanguardista, dejando atrás la sofisticada inspiración que veíamos en los pantalones. Desde luego, Ghesquière ha dado en el clavo al definir la colección como "un juego de colores", aunque nosotros hubiéramos añadido la palabra "desconjuntados" a la expresión del diseñador para definir algunas de sus creaciones. Cuero brillante, faldas con estampados de vieja, gafas de sol horteras... sinceramente, me alegro de no ser uno de los invitados al desfile (yo quiero ir a uno de Chanel, a ver si tito Karl me invita...). Solo salvo en este caso el vestido amarillo pastel que vemos en el centro, porque su cremallera y su volante me recuerdan mucho a la estética de Victoria Beckham. Y sí, que un diseñador te recuerde a otro no es nada bueno.

Y normalmente solemos cerrar el repaso a una colección con los mejores diseños de esta, pero en esta ocasión lo haremos con los looks "más Ghesquière". Como os decía, pocos han sido los estilismos en que hemos visto algo propio del diseñador, pero estos tres captan la esencia de la colección. Una esencia no muy favorecedora, se mire por donde se mire, pues la mezcla de estampados, cortes y colores termina por crear extrañas masas de tela en vez de vestidos. ¿Y qué me decís del calzado? Yo no sé si son peores los salones de vieja con doble correa o las espartanas hasta la rodilla...

Aceptadlo... hay mucha gente que es partidaria de la "modernidad" que está aportando Nicolas Ghesquière a Louis Vuitton, pero yo soy un devoto de Chanel y eso nadie va a cambiarlo. De momento, suya es la mejor colección Resort 2015 que hemos visto hasta la fecha.

O.