Los American Music Awards 2013

Siento tener la mañana ocupada en tonterías como ir a la universidad, porque eso implica que no puedo analizar las alfombras rojas hasta la tarde. Así que, antes que nada, quiero agradeceros que leáis esta entrada después de haber visto ya los vestidos unas mil veces.

Eso sí, os prometo una lectura amena y divertida. Antes de comenzar, os advierto de que hoy no tengo el cuerpo para disgustos, así que he decidido obviar a aquellas que han sido directamente vulgares (léase Rihanna o Ke$ha) para centrarme en los 10 looks que realmente me han parecido interesantes:

Iba a decir que Lady Gaga estaba más normal que de costumbre, pero el hecho de que entrara en la red carpet encima de un caballo biónico invalida un poco mi argumento... Sea como sea, la cantante logró parecer una persona normal (teniendo en cuenta siempre que hablamos de cantantes) gracias a un original vestido de Versace en un bonito color malva, que tenía una serie de bonitas cadenas en la parte frontal del bustier (inspirados en una armadura y muy a juego con el caballo). Por último diré que no veía con buenos ojos a Lady Gaga como imagen de Versace, pero ahora empiezo a entender su parecido con Donatella (aunque con menos bótox, claro).

Todos los premios musicales necesitan uno de esos looks alternativos en plan hippie, y anoche fue Zendaya Coleman la encargada de proporcionárnoslo. Sin duda, este conjunto en blanco nuclear de pantalones evasé y blusa-túnica de escote Diana firmado por Donna Karan es algo distinto... pero ahí termina mi entusiasmo. Para mí, la actriz se ha cargado el estilismo con unos innecesarios brazaletes plateados y esos horrorosos peep-toes dignos de una stripper. Además, no sé yo si esa melena tan lacia me gusta...

Ha sido ver a Jennifer Hudson vestida con este Dior y acordarme de Clotilde Courau, que lució un diseño muy similar hace casi dos meses. Y claro, contra esa gran dama francesa no se puede competir. Si bien me sigue encantando el contraste entre el color naranja y el rosa y me parece un gran acierto esa sombra de ojos en color azul eléctrico, la cantante sale perdiendo en la elección de complementos. Este diseño puede pedir muchas cosas, pero no creo que unos complementos en acabado metalizado sea una de ellas...

Otra que no termina de convencerme es la actriz Jaimie Alexander, que apostó por cambiar el clásico vestido por un mono vintage de Armani. La verdad es que lo único que me gusta es el efecto entrecruzado del escote halter, porque el resto de elementos van de mal en peor: los bajos del pantalón están mal ajustados, las arrugas de la zona superior de las piernas son muy antiestéticas, el moño a lo choni no pega ni con cola... En fin, que no.

Normalmente la mejor vestida de este tipo de premios suele ser Taylor Swift, pero anoche me llevé una de las mayores decepciones dentro de su trayectoria estilística. Sabemos que, de vez en cuando, la cantante deja a un lado los vestidos de princesa para enfundarse en los clásicos minivestidos "brilli brilli"... pero este diseño de Julien Macdonald no es ni siquiera uno de los mejores dentro de su repertorio. Fuera de la abertura triangular en la zona central del busto, todo lo que contiene este look lo hemos visto decenas de veces. Por primera vez en mucho tiempo, Taylor no me convence.

Vale, puede que a primera vista lo que lleva Emma Roberts pueda parecernos un saco de basura brillante, pero el look tiene su encanto. Realmente, este modelo de corte un tanto amorfo y con plisados a la altura de la cintura es muy típico de Lanvin, por lo que tampoco nos supone ninguna novedad sustancial. Sin embargo, Emma logra vendernos el look gracias a la arriesgada combinación con el fucsia de los complementos y ese peinado con raya al lado, que la hace estar guapísima. Además, con esos bonitos ojos, a mí me termina de convencer.

Creo que esto no lo había dicho nunca y seguramente no lo vuelva a repetir tampoco: le agradezco a Miley Cyrus que, por una vez, no llevara sujetador. Sinceramente, hay algo que consigue que este look me encante (y eso que la unión entre Miley y Versus, la línea juvenil de Versace, nunca nos había supuesto nada bueno). No sé si será por el toque punk que nos aportan esos imperdibles dorados o por la naturalidad con la que posa Miley, pero me gusta mucho. Y se nota que, como Jennifer Lawrence, Miley es mucho más amiga de un estilo un tanto andrógino, alejado de esos monumentales vestidos que a veces le quiere imponer su estilista. Aquí está la prueba.

Y nos vamos ahora con mi top 3 de la noche:

A mí me entra frío con solo verla, pero no podemos negar que Nicole Richie estaba guapísima con este diseño en blanco nuclear (el color de la noche, sin duda) firmado por Emilio Pucci. Lejos de caer en la vulgaridad que podrían suponer los cortes de la parte lateral, Nicole sabe aprovechar el vestido para hacernos sentir envidia de su tonificado físico y, además, aportar su toque elegante. Desde los flecos del clutch hasta esas joyas doradas, pasando por la sombra de ojos a lo Cleopatra, todo desprende sofisticación. Para mí, un look de 10.

También de 10 pero mucho más retro es el estilismo que nos ofreció mi querida (a veces, odiada) Katy Perry. Escoger un Oscar de la Renta ya es una garantía de por sí, pero el hecho de que en este caso se combinen dos de los emblemas clásicos de la firma (el estampado a topos y los bordados florales) logra que resulte, de algún modo, novedoso. Además, lleva uno de esos adorables clutch en forma de libro creado por la francesa Olympia Le-Tan , muy a tono con el acabado dulce de su voluminosa melena. Por looks como estos merece la pena seguir estos premios.

Y, aunque sé que este look no va a gustar a mucha gente (de hecho, por lo que he leído hasta ahora no ha gustado mucho), yo apuesto incondicionalmente por defender el estilismo que lució anoche Zoe Saldana. No suelo ser muy fan de los vestidos de Roland Mouret, pero el escote asimétrico de recorte y ese inesperado panel de raso azul en uno de los laterales me tienen enamorado. Reconozco que no es el vestido más espectacular de la noche, pero a mí me parece el look más redondo que vimos en la alfombra roja. Y, en gran parte, es por su peinado y su maquillaje:

Puede que, a ojos de la mayoría, este look de belleza pueda parecer muy común, pero creo que justo en eso está la clave. Zoe Saldana no es muy de arriesgar en su maquillaje, ni tampoco en su habitual melena lisa, pero de algún modo logra que esto encaje en todos y cada uno de los vestidos que escoge. Y por eso la admiro tanto, porque en vez de ser ella quien cambia para adaptarse al vestido, siempre es el vestido el que se adapta a ella.

Bueno, y hasta aquí el repaso a los AMA 2013. ¿Qué estilismo os ha gustado más?

O.