Premios Emmy 2015: Las medias tintas de la noche (Parte I)

Hoy comenzamos la mañana del mejor modo posible: con una alfombra roja. Dejando a un lado mi indignación por la derrota de Mad men y de Christina Hendricks en sus respectivas categorías, lo cierto es que estoy bastante satisfecho porque vais a ver que hacemos frente a una edición de los Premios Emmy con un elevado nivel sobre la alfombra roja.

La prueba de ello es que no tenemos una entrada de peor vestidas de la noche porque en realidad no hay (nota: ayuda en parte que Lena Dunham no fuese), así que comenzamos directamente con una serie de looks más que correctos pero que no se han colado entre los mejores a causa del elevado nivel de la velada:

Y quiero comenzar precisamente con tres estilismos que me parecen muy buenos pero que, debido a los looks tan espectaculares que nos dejó la alfombra roja, quizás terminan pasando algo desapercibidos. Lena Headey, nominada por su papel en Juego de tronos, posaba ante las cámaras con un aparatoso ball gown que ejemplifica a la perfección el dramatismo y la sofisticación características de Zuhair Murad, regalándonos uno de los escotes más profundos a la par que elegantes de la noche. Por un tono similar apostaba Sarah Hyland, enfundada en un diseño que se caracteriza por el juego de volúmenes típico en Zac Posen (y sí, le echaremos la culpa de las arrugas a la foto). Por otra parte, Sarah Paulson se decantaba por un vestido de Prabal Gurung cuajado de aplicaciones, elemento que fue una de las tendencias de la noche. Pero la sombra de Diane Kruger es alargada y la versión en rojo que lució la alemana nos convenció más.

A falta de Michelle Dockery, la serie Downton Abbey también contó con su representación sobre la alfombra roja. Tras el buen resultado del año pasado, Joanne Froggatt volvió a decantarse por un diseño de J. Mendel, perteneciente en este caso a la colección Resort. No me cabe la menor duda de que esta propuesta debía ganar mucho vista en movimiento, pero el complicado corte del bustier junto con la poco acertada melena suelta terminan por empañar la limpieza que podría haber transmitido este look. Menos afortunada estuvo Laura Carmichael, quien sí hubiese entrado en nuestra lista de peor vestidas, pues no consigo ver nada que me haga comprender su apuesta por este vestido de Erdem Resort 2016. Sabemos que Laura es perfectamente capaz de defender el estampado floral en cualquier situación, pero creo que el corte de inspiración bohemia no le favorece especialmente y estaréis de acuerdo conmigo en que el estampado de este vestido tampoco es ninguna preciosidad...

Mención aparte merecen las únicas dos actrices que se atrevieron a romper el dress code en favor de vestidos por debajo de la rodilla. No sé qué os parecerá este look de Kerry Washington, pero ya sabéis que la actriz es muy partidaria del riesgo sobre la alfombra roja y ya me gustaría a mí que siempre obtuviera resultados de este tipo (¿hace falta recordar sus desastres?). Solamente diré que me maravilla la riqueza de las aplicaciones de este Marc Jacobs, confeccionado como si fuese una cota de malla. Más sobrio es el estilismo que nos dejó Naomi Watts, quien rescataba un diseño perteneciente a la colección Alta Costura Fall 2012 de Christian Dior. Es evidente que las últimas colecciones de Raf Simons para la maison francesa no funcionan como deberían, así que no es de extrañar que la intérprete haya preferido recuperar este diseño que combina dos tipos de estampado floral por la parte del anverso y del reverso.

También hubo quien arriesgó con el color de su vestido y, pese a que yo soy muy devoto del color amarillo, a algunas les trajo mala suerte sobre la alfombra roja. No es ninguna novedad ver a Heidi Klum luciendo la Alta Costura de Versace y siempre he dicho que, por mucho que me disguste esta firma, la unión entre la modelo y Donatella está por encima del bien y del mal... Sin embargo, esta no era la ocasión para lucir un vestido tan vulgar atrevido. No nos convence tampoco Taylor Schilling, pues la protagonista de Orange is the new black resbalaba al optar por este Stella McCartney Resort 2016 con escote asimétrico y volante en el bajo. Creo que el color le sienta francamente bien, pero la silueta es visualmente poco favorecedora.

Y cerramos la primera entrada de este repaso con un color que nunca puede faltar: el negro. De todos los diseños, nos quedamos especialmente con el de Brandon Maxwell que lució Lady Gaga y con el original Alexander Wang de Tarashi P. Henson, que actualizaba este clásico color con unas cadenas a modo de tirantes y una abertura abdominal en forma de triángulo. Julia Louis-Dreyfus subió a recoger su premio enfundada en un vestido de Safiyaa que, como es costumbre en ella, no nos dice nada pero le sienta de maravilla. Más reseñable es la pareja formada por Julie Bowen y su espectacular vestido de Georges Chakra, gustándonos especialmente la sorprendente distribución de sus tirantes.

¿Qué os han parecido estas primeras propuestas? Creo que empezamos con un nivel bastante bueno, pero enseguida veréis que gran parte de los looks de la noche fueron excepcionales.

O.