Aunque lleguen a la alfombra roja sabiendo que no van a ganar, pues muchas veces los Oscars destacan por la ausencia de sorpresas en las categorías interpretativas, todas las nominadas deberían tener la obligación de vestirse de ganadoras.
Eso es precisamente lo que hizo mi favorita en la alfombra roja de los Oscars, aunque ya os advierto que el estilismo no es para todos los gustos y que la fotografía no hace justicia, ni mucho menos, a la elegancia que desprendía este vestido en movimiento:
Como es habitual en los diseños de McQueen, el preciosismo de las aplicaciones aporta ese toque victoriano que tanto nos gusta ver en los diseños de la firma inglesa, apostando en esta ocasión por la minuciosidad de las incrustaciones a base de perlas. Desde todos los ángulos, el vestido era sencillamente perfecto y os aseguro que fue un privilegio poder verlo en movimiento (aquí os dejo el link para que lo comprobéis). Para cerrar el estilismo, era necesario mantener un look de belleza muy natural y abstenerse de añadir complementos demasiado llamativos, permitiendo así que Felicity (y no solamente el vestido, he aquí el triunfo del look) brillara con luz propia.
Por este tipo de sorpresas me gustan tanto los Oscars, porque no me esperaba que una actriz de figura menuda como Felicity Jones fuera capaz de llevar un vestido de esta envergadura y defenderlo cual reina de los Oscars. ¿Os parece el look de Felicity tan majestuoso como a mí? ¿Consideras que otra famosa merece más la primera posición de nuestro top 3? Hasta aquí ha llegado nuestro repaso, ¡ahora os toca opinar a vosotr@s! Volveremos en breve con los looks de las fiestas posteriores a la entrega de premios.
O.
jajajajaja... No sé por qué pero ya sabía que Felicity iba a ser tu favorita...jeje. Sinceramente creo que no eres del todo justo, porque efectivamente las arrugas que se aprecian en la falda de este espectacular diseño, deslucen el vestido y no transmite la sensación que debería, en mi opinión. La parte de arriba es impecable, sí, pero he visto diferentes fotografías de la actriz y es que las arrugas estropean completamente el look.Si llega a ser otra actriz la que luce este vestido...jajajaja. Pero me parece bien que la defiendas con uñas y dientes, jeje. Yo hago lo mismo con mi adorada Emma Stone, que por supuesto creo que se merece este puesto más que nadie, a parte del maravilloso e impecable Elie Saab, por todo lo que transmite... para mí no tiene rival, jejeje. Sigue así, me gusta mucho leerte!! Un besito
ResponderEliminarEstá claro que cada cual tiene sus gustos y me parece bien que defiendas a Emma pero, del mismo modo en que las arrugas de Felicity puede que "te echen para atrás", a mí me faltó el factor sorpresa que suele aportar Emma Stone. De hecho, considero que su vestido podría haberlo llevado casi cualquiera de las asistentes a los Oscars.
EliminarYo soy el primero en ser crítico con Felicity, de hecho en los BAFTA dije que no me convenció para nada... En esta ocasión es muy cierto eso de que las fotografías no captaban la esencia del vestido, aquí te dejo un link para que lo veas en movimiento:
https://www.youtube.com/watch?v=XH6ipppYVWo
De todos modos, siempre está bien que haya diversidad de opiniones. ¡¡Un beso!!
¡Por fin una opinión experta que encaja con la mía! Yo cuando vi el vestido de Felicity me quedé prendada y no me importan las arrugas porque en movimiento era sencillamente muy superior a lo que vimos en las otras actrices de la noche. ¡Un saludo!
ResponderEliminarYo también me alegro de que esteos de acuerdo :)) Como bien dices, el vestido de Felicity es de esos que enamora y creo que (pese a ser consciente de las arrugas) a mí me pasó más o menos lo mismo que a ti. ¡Un beso!
EliminarCreo que me he enamorado de su vestido. Es un vestido majestuoso como dices y ademas es muy de novia de cuento de hadas. Es un vestido de ensueño y perfecto para recoger recoger un Oscar, es una penita!!
ResponderEliminarAdemas ella es tan dulce que con lo que se ponga esta preciosa.
Yo le doy también mi medalla de Oro.
Que pena que ya haya acabado el tour de los Oscars porque disfruto como una enana.
Me encantas y tu blog es maravilloso!! Beso corazoncete
¡Hoy parece que no podemos estar más de acuerdo! El vestido de Felicity ha levantado muchas criticas a causa de sus arrugas, incluso he visto que algunas páginas la posicionaban entre las peores del evento, pero yo cada vez que lo miro me gusta más jajajja Como bien dices, es una actriz muy dulce y elegante, defiende todo lo que luce.
Eliminar¡¡Gracias por pasarte por el blog y dejar siempre tus comentarios!! No hay nada que disfrute más que estos momentos de criticas/cotilleos contigo jajajaa ¡¡Mil besos!!
OMG!!! Desde que lo vi sabía que no habría otro que lo superara... si es que nuestro McQueen... En movimiento es increíble, y como bien dices tu que eres muy tiquismiquis con las arrugas bien sabes que es por la excelente calidad del satén... estoy enamorada de él, ese toque veceniano como dices, las aplicaciones... todo todo, no me puede gustar más!!
ResponderEliminarNuestro McQueen... es que mucho hay que hacer para superar a la casa británica y, en casos como este, es sencillamente imposible superarla!! Todo es perfecto, salvo las arrugas cuando el vestido no está en movimiento, pero está claro que fue uno de los pocos (por no decir el único) vestidos de la noche a la altura de los Oscars.
EliminarAy Oscar... pues me vas a matar cuando te pases por casa de La Tonta... será que la foto no le hace justícia? madre mia, qué Oscars más malos. Me dejas describirlos como "ni chicha ni limoná"? y sobretodo.. cómo no le das la medalla de oro a NUESTRA Cate? jajaajaj
ResponderEliminardesencuentros aparte, siempre es un placer leer tus análisis. Voy a por el post de la fiesta post.
un saludazo!
Ya intuía yo que no íbamos a coincidir, pero estaré encantado de pasarme por tu blog para comprobarlo ajajja
EliminarSi te digo la verdad, me parecieron unos Oscars con bastantes looks perfectos pero al mismo tiempo muy aburridos. Y sí, Cate se ha quedado a las puertas del oro, pero es que cuando vi entrar a Felicity supe que era insuperable.
¡Un beso!